miércoles, 19 de junio de 2013

Mitos sobre el dolor



Esta entrada la hago gracias al aporte de información, constante y de forma desinteresada, que hace el compañero fisioterapeuta  Carlos Castaño Ortiz, ya sea via Twitter, Facebook o en su blog.
 
Simplemente es la traducción al castellano de esta entrada:
Puedes verla pulsando sobre el título o leer el texto subyacente
 
 
Tenga cuidado de no caer en ninguno de los mitos comunes sobre el dolor crónico. Estos llamados "hechos" pueden socavar su plan de control del dolor antes de que alguna vez se hagan realidad. ¿Cómo? Le convencen de que el dolor crónico está en el asiento del conductor y que no hay mucho que puedas hacer acerca de sus dolores y molestias. La solución: Despeje su mente de cualquier creencias erróneas que hemos adoptado, a partir de estos mitos:

El dolor crónico siempre tiene una causa subyacente.
Hecho:
El dolor a veces viaja solo.
No todo el dolor crónico puede ser asociado a una condición física identificable o lesión. Claro, ese accidente automovilístico menor hace 3 meses podría haber provocado el dolor de espalda, o tal vez demasiadas horas en el campo de fútbol sea la causa de su dolor de rodilla. O puede que no. A veces el dolor se desarrolla sin ninguna razón aparente. Aún así, la incomodidad es muy real. Aunque es más difícil de aliviar el dolor sin una causa identificable, puede administrarse eficazmente.

La medicación es la única manera de aliviar el dolor crónico.
Hecho:
El manejo del dolor puede incluir muchos enfoques.
Cuando pensamos en el alivio del dolor, a menudo pensamos pastillas para el dolor - ya sea a través de venta libre o con receta para el dolor, o incluso opioides más fuertes y potencialmente adictivos para el dolor más severo. Sin embargo, las píldoras no son la única forma de controlar el dolor. Usted puede agregar una serie de métodos alternativos de alivio del dolor a su arsenal, incluyendo una dieta saludable, ejercicio, sueño profundo, y simples remedios para el dolor de autocuidado. (o la fisioterapia)

El dolor crónico es una parte inevitable del envejecimiento.
Hecho:
 Las molestias y los dolores pueden aparecer a cualquier edad.
La idea de que se debe esperar el dolor con la edad - y aprender a vivir con el - es un mito sobre el envejecimiento. Un ejemplo: El dolor de espalda afecta con mayor frecuencia a mediana edad (35 - a 50 años de edad). Sea cual sea su edad, hable con su médico acerca de sus dolores crónicos o molestias. Use esta guía para ayudarle a hablar con su médico o fisioterapeuta acerca de su dolor crónico.

Admitir que tener dolor es una señal de debilidad.
Hecho:
Reconociendo que el dolor es un signo de valentía y fuerza.
Se necesita coraje para aceptar el dolor crónico, pero hacerlo es el mejor primer paso para tratarlo. Sufrir dolor constante en el silencio no es manera de hacerle frente.

El reposo en cama es mejor para reducir el dolor crónico.
Hecho:
Moverse con el dolor ayuda a mejorarlo.
Cuando su artritis de rodilla, cadera adolorida o lumbalgia tenga brotes de dolor, es tentador simplemente acurrucarse en la cama. Mientras que su doctor le puede recomendar reposo en cama cuando el dolor es muy intenso, si esto se convierte en un hábito diario se intensificará su malestar. Incluso un suave movimiento o un estiramiento funciona mejor para aliviar el dolor que la recomendación de un reposo completo. Además, el ejercicio físico regular, aprobado por su médico, regula el impulso de liberación de neurotransmisores que alivian el dolor, como la dopamina y la serotonina.
 
Si te ha gustado la entrada y quieres saber más sobre el dolor, pulsa sobre el texto inferior y tendrás acceso a mucha información sobre el tema:
 
 
 
David Carrascosa Fernández
Fisioterapeuta - Osteópata C.O.
nº colegiado 23 - 1449
 

lunes, 10 de junio de 2013

Sobreprotección a hijos con discapacidad o deficiencia

 
 
En la clínica cuando trato a padres de niños con discapacidad o deficiencia, o cuando los trato a ellos mismos... les pido a los padres que, por favor, no ayuden a que su hijo sea minusválido.
 
 
A lo mejor te suena un poco raro...pero analicemos un poco lo que digo y después volvamos a ver la petición:
 
Discapacidad: Es toda restricción o ausencia de la capacidad de realizar una actividad en la forma o dentro del margen que se considera normal para un ser humano. Por ejemplo, la alteración en la capacidad de aprender, o la dificultad para vestirse por sí mismo.

Deficiencia: Es toda pérdida o anormalidad de una estructura o función psicológica, fisiológica o anatómica. Por ejemplo, la pérdida de la vista, la pérdida de la memoria o la pérdida de una pierna por ejemplo.
 
Minusvalía: Es una situación desventajosa para un individuo a consecuencia de una deficiencia o discapacidad que limita o impide el desempeño de un rol que es normal en su caso en función de la edad, sexo o factores sociales y culturales. Por ejemplo, la imposibilidad de conseguir empleo, la ausencia de relaciones sociales o los estados depresivos y de ansiedad frecuentes.



Muchos padres cuando tienen un hijo con algún tipo de problema se vuelcan demasiado en él, lo cual es normal al principio, pero deberá normalizarse con el tiempo con el fin de evitar que se genere una sobreprotección sobre el mismo.

¿Y cual es el problema de la sobreprotección?...Que fomenta que la relación con nuestro hijo se base más en el MIEDO que en la CONFIANZA y el AMOR... y esto puede hacer que con el tiempo la preocupación esté más centrada "en la discapacidad del hijo" que en el "propio hijo"...más centrada en "lo que hay que hacer" que en lo "que él quiere hacer"...y eso a la larga limitará sus posibilidades, su capacidad y su grado de independencia.
 
 
Este video, con el que confieso que he llorado a lagrima viva, deja claro el mensaje:
 
 

 
Por favor...no lo olvides...primero está tu hijo y luego su discapacidad
...confía en él...¡¡es tan capaz como tú o incluso más!!


te reitero la petición: No ayudes a que tu hijo sea minusválido...a lo mejor a él le viene mejor que te cuides, desconectes y te dediques algo de tiempo a tí...no olvides que toman ejemplo de tí y de tu pareja...cuidate y mimate a tí también!!


Si quieres MIRA ESTA ENTRADA DEDICADA A LAS MADRES


David Carrascosa Fernández
Fisioterapeuta - Osteópata C.O.
nº colegiado 23-1449


sábado, 8 de junio de 2013

Crecimiento personal para madres del Siglo XXI



Esta entrada se la dedico a mis pacientes "madres" que poco a poco han ido abandonando el mundo del "dolor", para disfrutar del mundo de la "salud"... y a las que están abandonando el "camino de la rutina" para aventurarse en el "camino de lo nuevo"...entendiendo que cada día escriben su camino... un camino lleno de feminidad, cariño y gratitud.

A tí que eres madre...a ti que:

... estás disfrutando del presente, dejando atrás los pensamientos recurrentes que te ataban al pasado y las anticipaciones que hacían que miraras al futuro con miedo y preocupación.
 ... has empezado a tener tiempo para ti...a ver que no todo puede ser trabajar, limpiar, ir de un lado a otro cuidando de los demás...y empiezas a entender que cuidándote a ti misma y disfrutando de tiempo para ti, están cuidando de los tuyos y disfrutando de los que realmente son importantes en tu vida.
… te has olvidado de las prisas y has empezado a disfrutar de tu plato de comida, sin tener que estar levantándote pendientes de unos y de otros… dándote cuenta de la cantidad de aromas, texturas y sabores que se esconden detrás de un simple plato de comida hecho con cariño.
 … has podido ver que para salir de la soledad lo mejor es actuar en vez de pedir, lo más sabio es cambiar una misma en vez de intentar que los demás cambien…que te has aventurado a salir de casa y te has apuntado a actividades o simplemente te has ido a pasear con más gente.
... has entendido que muchas veces no se pueden forzar las cosas y que hay que actuar con naturalidad, aceptando que las cosas NO son como son, sino como es cada uno y que solo cambiando cada uno por dentro empiezan a cambiar las cosas por fuera.
... has aprendido que muchas veces el cabreo, la rabia y la frustración que tenías con los demás no era más que el cabreo que tenemos con nosotros mismos.
 ... disfrutas de tu hogar y estas empezando o has dejado de pagar con tu familia las tensiones que soportabas fuera de casa, ya fuesen estas ocasionadas por el trabajo, por los amigos o por otros familiares.
... confias en tus hijos y entiendes que querer y amar no es lo mismo que sobreproteger y agobiar, y te has atrevido a dejar que tus hijos se caigan, que se equivoquen y has sabido dejar que actuaran según su criterio, para recibirlos luego con cariño, fomentanto así la seguridad en si mismos y la sensación de amor por tí.

... que has sabido perdonar a tus padres, entendiendo que tu padre quizás trabajó demasiado y tu madre estuvo más pendiente de cuidarte que de disfrutarte...y pasado el tiempo entiendes que no puedes seguir sobreprotegiéndolos e intentando cambiarlos, por que empiezas a ver "que son grandes" y que ellos deciden estar como y donde están, y eso te hace sentir una relajada sensación de aceptación.
… no has dejado que las tensiones con tu pareja afecten en tu relación con tus hijos… que has sabido comunicarte con tu pareja para salir reforzados de cada problema o para entender que quizás haya un problema que tratar en tu relación.
... aceptas a tu pareja con sus defectos y sus virtudes y te has dado cuenta de que llevabas tanto tiempo intentando cambiarlo que te estabas empezando a olvidar de disfrutar lo que te hizo que te enamoraras de él.
... que has comenzado a vivir tu feminidad, cuidando tu mundo interior, teniendo tiempo para disfrutar de tu pareja, y evitando que las tensiones de alrededor afecten a esos momentos de intimidad que muchas veces facilitan la comunicación y la complicidad con el otro.
te has dado cuenta de que para que tus hijos cambien no tienes que repetirles las cosas una y otra vez, sino darles ejemplo con tus abrazos, sonrisas, mimos y actos…encontrando el equilibrio entre el respeto y el amor.
… has dejado poco a poco de hablar solo de los problemas y te has centrado mejor en hablar de cómo te sientes frente a ellos o simplemente como te sientes en ciertos momentos, abriendo tu corazón sin miedo a los demás.
… has aprendido que muchas veces por no decepcionar a los demás te estabas decepcionando a ti misma…llenándote de rabia, soledad y miedo...dejando de disfrutar de los que realmente te quieren como eres.
... te has dado cuenta que durante tiempo has querido que los demás cambiaran aquello que tú no te atrevías a cambiar... que te has llenado de cariño, de optimismo y has empezado a cambiar y a darte cuenta que te gusta la mujer que va renaciendo.
... has empezado a observar a tus hijos y a darte cuenta de que son perfectos...que por más que pienses en los defectos y en lo que no te gusta de ellos, cuando te dejas llevar por lo que sientes y no por lo que piensas te das cuenta de que te invade una sensación de amor que hace que desees disfrutar de ellos, por que pase lo que pase les quieres con locura.
… te has mirado al espejo y has sabido quererte como eres, entendiendo que eres única en el mundo y que esa aceptación de ti misma te llena de amor y de cariño hacia ti y hacia los que te rodéan…
…A ti que estás empezando este camino…a ti que lo estás caminando…o a tí que sin darte cuenta, tras leer estas líneas te está empezando a dar ganas de disfrutarlo...a ti…hija…mujer…y madre…te digo: ¡¡¡Gracias!!!
Dedicado con todo mi cariño a todas las madres del mundo...y sobretodo a las mamis que trato, a mi abuelita Adora, a mi madre Visi y a mi esposa Caty por enseñarme cada día con sus palabras, sus gestos y sus actos... 
...VA POR VOSOTRAS!!!
David Carrascosa Fernández
Fisioterapeuta- Osteópata C.O.
nº colegiado: 23-1449
Linares - Jaén